Ficha: 95 min. | Dibujos Público apropiado: Todos Año: 2016 País: EEE.UU., China Dirección: Alessandro Carloni, Jennifer Yuh Tras conocer a Li Shan, su padre biológico, Po le acompaña al poblado donde vive con varios osos pandas que desafían el peligro de extinción. Pero deberá regresar junto a sus heroicos compañeros para hacer frente al Coleccionista, malvado espíritu que absorbe los poderes de todos sus rivales derrotados. Vencerle requerirá que Po entrene a los lugareños en las artes marciales. Resultan tan rentables los filmes de animación digital que se estiran las franquicias demasiado, salvo en el caso de las inigualable saga iniciada con Toy Story, donde más títulos serán bienvenidos. No es el caso del oso panda más peleón, pues tras un brillante comienzo, la segunda resultaba un tanto rutinaria, y Kung Fu Panda 3 poco más o menos lo mismo. Acumula píldoras de sabiduría oriental simplificadas, que divulgan moralejas positivas, sobre todo en torno a la importancia del esfuerzo para mejorar en la vida. Pero están metidas con calzador, y agota un poco la saturación en los diálogos de conceptos como “el yin y el yang”, el “ki” o el “tercer ojo”. A pesar de todo cumple con creces con su objetivo. Técnicamente impecable, el guión aporta los suficientes puntos de interés y mucho humor. Los personajes nuevos tienen carisma, como los ya conocidos, sobre todo el progenitor del protagonista, que acaba formando un divertido dúo con el genial Sr. Ping, el ganso que ha ejercido como padre adoptivo, por lo que ambos acaban siendo lo mejor del film. Coproducida entre Estados Unidos y China, con vistas a poder estrenar sin problemas en el país comunista, no deja de resultar paradójico (aunque positivo) que esté detrás de la financiación Shanghai Alliance Investment, compañía gubernamental, cuando como otras producciones del país rinde un sincero tributo a la tradición del país, que Mao se obsesionó por borrar utilizando métodos sangrientos. Firma: Juan Luis Sánchez