Ficha: 134 min. | Drama | Thriller | Biográfico Público apropiado: Jóvenes Año: 2016 País: EE.UU., Alemania Dirección: Oliver Stone Intérpretes: Joseph Gordon-Levitt, Shailene Woodley, Scott Eastwood, Nicolas Cage, Zachary Quinto, Timothy Olyphant, Rhys Ifans, Joely Richardson, Melissa Leo, Keith Stanfield, Tom Wilkinson Las tribulaciones de Edward Snowden, el hombre que destapó el espionaje masivo a ciudadanos corrientes llevado a cabo por el gobierno de los Estados Unidos, es un tema Oliver Stone cien por cien. El cineasta que ha dedicado una trilogía a Vietnam, buceado en el lado oscuro de Wall Street, paseado por conspiraciones y vidas de presidentes, y que ha recalado incluso en el 11-S, además de atreverse con una serie documental y un libro sobre la historia no contada de su país, sólo podía relamerse de gusto ante la posibilidad de lleva a la pantalla esta historia. Quizá las pegas a que debía enfrentarse estriban en la abundante información publicada en los medios sobre Snowden junto a la existencia del oscarizado e imprescindible documental de Laura Poitras, Citizenfour. En cualquier caso Stone, tras cuatro años fuera de la ficción, demuestra en Snowden su buen pulso de cineasta, su historia atrapa, cuenta con un buen reparto y sabe visualmente impactar acerca de las inquietantes posibilidades de espionaje que brindan las nuevas tecnologías. Está bien que nos permita conocer el background de Snowden hasta llegar a contratista de la CIA, y la relación con su novia Lindsay Mills, aunque sea precisamente la subtrama amorosa una de las partes más flojas del film. Donde más sólido se muestra es en la denuncia, en presentar el punto de vista del protagonista, por qué actuó como actuó; aunque Snowden se presenta como un héroe sin fisuras, al estilo capriano de Jim Garrison de JFK, no hay lado oscuro ni se responde a la pregunta sobre de qué otro modo podría afrontarse la amenaza terrorista. En cualquier caso se palpa la decepción de este cineasta liberal ante el modo en que maneja la cuestión el presidente Obama. Los actores –Joseph Gordon-Levitt, Shailene Woodley y compañías– están bien, al estilo de lo que exige un thriller, aunque quizá un tanto fríos. Firma: José María Aresté