El pasado 20 de febrero iCmedia participó en una mesa redonda organizada por el Center for Data Innovation sobre Inteligencia Artificial y desinformación en el contexto de las próximas elecciones europeas. Milan Zubicek, responsable para las políticas europeas de Google, analizó los esfuerzos invertidos por la plataforma contra la difusión de noticias falsas explicando como a fin de garantizar el respecto del código de conducta de la Comisión, Google hará accesible de forma previa a las elecciones un registro de todos los agentes que hayan creado publicidad de contenido político. Los usuarios tendrán igualmente acceso a los presupuestos pagados y a los distintos datos utilizados por la plataforma para la publicación de dichos anuncios. Clara Hanot, de EU Disinfo Lab) se centró en el papel de la Inteligencia Artificial en relación al fenómeno de la desinformación. En su opinión los algoritmos, siendo parte integral del problema, se presentan también como elemento importante en la posible solución. En esta línea, Jans Herik Jeppesen, Director de Políticas Europeas en Center for Democracy and Tecnology, subrayó cómo los contenidos virales afectan generalmente de forma emocional a los usuarios. Este género de contenido facilita la inclusión de informaciones falsas o tendenciosas, alcanzando a veces una audiencia muy ancha. Emplear la Inteligencia Artificial para contrastar la desinformación nos expone al riesgo que las maquinas bloquen contenidos verificados, porque los algoritmos no pueden distinguir entre contextos diferentes. Esta problemática se encuentra también en las tecnologías de reconocimiento automático, actualmente usadas, e introduce la cuestión del papel del ser humano en un mundo de máquinas. En efecto, el hombre tendrá que convertirse en el controlador de los controladores, mientras los sistemas de computación podrían ayudar a detectar los patrones en la difusión de noticias no verificadas, permitiendo el rastreo de los actores que introducen los contenido en las plataformas. Segundo Paolo Cesarini, las plataformas han adoptado medidas contra la desinformación, contribuyendo de esta manera al progreso global que ha seguido a la adopción del código de conducta. No obstante, existen aún otras problemáticas ligadas a la evaluación de la implementación del código. En sentido, el próximo paso en la lucha contra la desinformación será la creación de medios para estudiar las características y los patrones de las informaciones falsas y virales para lo cual la colaboración entre la Unión Europea, las plataformas internet y la sociedad civil será fundamental.