Horizon Forbidden West es la secuela ideal. Mejora en todo la fórmula original pero con la misma esencia.

Horizon Zero Dawn supuso una grata sorpresa cuando debutó en 2017, llegando a superar incluso nuestras mejores expectativas. Aquella nueva IP (o saga) con una fórmula jugable a lo Uncharted y mecánicas que recordaban a los Assassin’s Creed, tenía buena pinta. La duda era si llegaría a sobresalir entre otras exclusividades como The Last of Us II, Uncharted 4 o Ghost of Tsushima. El resultado final nos demostró que era una aventura única, muy bien trenzada y con carisma e identidad propia.

Ahora, cinco años después, nos llega esta secuela como estandarte para PS5 -aunque también aterriza en PS4- y lo hace con una aventura que mantiene la esencia de la primera parte pero que la potencia y mejora en todo.

La crítica del principiante

La aventura nos emplaza tiempo después de donde la dejamos en Horizon Zero Dawn. Han pasado cinco años desde que Aloy pasara de ser una paria en su tribu a una salvadora. Parecía que todo estaba en calma, pero no sabemos por qué, el mundo está empezando a marchitarse. Aloy deberá dar un paso al frente y viajar al oeste más inhóspito para encontrar una solución.

Sin querer destripar el argumento, solo os diremos que la historia es más compleja de lo que parece y os enganchará de principio a fin. Ah, y si no jugasteis a la primera parte, no temáis. El juego nos pone al día desde el primer momento, ayudándonos a entender quién es Aloy y cómo es su mundo, a medio camino entre la prehistoria y la tecnología más avanzada.

Un gran mundo por descubrir

Horizon Forbidden West es una aventura en tercera persona en mundo abierto. Es decir, tenemos libertad para movernos a nuestro antojo por el extenso mapeado que se ira abriendo progresivamente. El título, como pasara con su primera parte, recoge los mejores elementos otros grandes títulos de la actual generación. A ratos recuerda a los excelentes Tomb Raider –tanto en el plataformeo como en los saltos y hasta en el uso constante del arco-. También se asemeja a Uncharted –especialmente en los combates y coberturas- y a Assassins Creed – en el parkour y el combate cuerpo a cuerpo-. Por otro lado, recoge elementos propios de un action rpg como Witcher 3, por ejemplo –todo el tema de subir de nivel y mejorar al personaje-.

Pero la grandeza de Horizon, una vez más, es la de conseguir dar coherencia a todos estos elementos y que la aventura de Aloy sea única. Forbidden West nos invita a cruzar vastos escenarios repletos de naturaleza salvaje en los que encontraremos diferentes relieves, restos de civilizaciones antiguas y tribus. Todo confluye de manera muy natural y resulta importante en el juego gracias al papel destacado que se le da en esta secuela a la exploración. Dedicaremos horas a escudriñar los escenarios para conseguir secretos y materiales, pero también para completar las numerosas misiones principales y secundarias que nos encargarán.

Evidentemente, las misiones principales son las más interesantes, pero Forbidden West ha conseguido que las secundarias sean casi tan atractivas como estas. Algunas serán más sencillas, como las de cumplir ciertos recados -que suelen consistir en obtener un objeto después de derrotar a algunas máquinas y llevarlo a quien lo pidió- pero otras están más elaboradas -como rescatar a personas, explorar ruinas y hasta participar en una “arena de lucha”-. Como ocurría en los últimos Assassins Creed, todo lo que hagamos servirá para subir nuestro nivel, desbloquear nuevas herramientas y armas o conocer más del mundo que nos rodea.

Luchando contra máquinas

La acción, las plataformas, los puzles y la exploración son los cuatro elementos más importantes del juego. Para mejorar el plataformeo, se han incluido nuevas herramientas, como un gancho (cómo recuerda al de Rise of Tomb Raider) o un ala para planear (muy similar a la de Zelda: Breath of the Wild). También podemos bucear, lo que quiere decir que se abre todo un mundo nuevo bajo el agua.

En cuanto a la acción, también resulta muy importante a lo largo del juego. Las máquinas son simplemente brutales. Son bichos gigantescos a medio camino entre dinosaurios y robots. Para vencerlos, deberemos hacer el mejor uso posible de nuestro arco, así como de sus diferentes tipos de flechas. Pero, también, podremos usar otros objetos que se desprenderán de estos enemigos. No penséis, eso sí, en combates frenéticos, sino más bien en enfrentamientos estratégicos, en los que las esquivas son casi más importantes que los ataques. El sistema de combate funciona a las maravillas y esos enemigos tan gigantescos hacen el resto.

Belleza de nueva generación

Pese a que se trata de un juego a caballo entre PS4 y PS5, lo cierto es que en la nueva consola de Sony luce de maravilla. Se nota el salto gráfico en el nivel de detalle, la iluminación, la ausencia de tiempos de carga. No son detalles concretos, sino la sensación de estar jugando a algo precioso y muy bien trabajado. Para colmo, el apartado sonoro es soberbio, con un doblaje muy bien implementado -destaca el papel de Michelle Jenner como Aloy-.

Lo mejor:

Juego gigantesco, repleto de cosas por hacer y extras por descubrir.
La historia es muy interesante y profunda.
Las gigantescas criaturas a las que nos enfrentaremos.

Lo peor:

Tanta cosa por hacer puede apabullarnos por momentos.

Conclusiones:

Horizon Forbidden West es una soberbia secuela que mantiene la línea del original, pero lo mejora en casi todo. Este título es un claro ejemplo de que tomando con acierto elementos de otros grandes juegos, se puede crear una aventura con personalidad propia que sobresalga de la competencia. A eso se suma una heroína con personalidad y una cantidad ingente de contenido por descubrir.

En cuanto a su contenido, está calificado para mayores de 16 años. A pesar de ser un título con un alto componente de acción, no es explícito. Además, no hay sangre ni cinemáticas desagradables. De igual manera, podemos hacer uso del sigilo para evitar el combate. Además, en su mayoría nos enfrentamos a máquinas-dinosaurio y no a personas. Eso sí, se tiene que decir que se trata de un juego de estilo adulto. Tanto en su planteamiento como en su jugabilidad. Por lo tanto, le sacarán partido especialmente aquellos usuarios acostumbrados a este tipo de producciones.