Dirección: Matthew Vaughn

Intérpretes: Nicolas Cage, Mark Strong, Chloe Moretz, Christopher Mintz-Plasse, Aaron Johnson, Jason Flemyng, Lyndsy Fonseca, Tamer Hassan

Guión: Jane Goldman, Matthew Vaughn

Duración: 106 min.

Género: Acción, Comedia, Cómic

 

Por: decine21

kickassCTercer largometraje del londinense Matthew Vaughn (Layer Cake, Stardust). En esta ocasión adapta un cómic creado por el guionista Mark Millar y el dibujante John Romita, Jr., aunque el film no es una traslación literal, pues el guión se escribió antes de que acabara su publicación. Sí que respeta el aspecto de los personajes, pero otros elementos están cambiados como la historia de Big Papi, uno de los protagonistas.

Aunque nadie cita como influencia a Miguel de Cervantes, es bastante evidente que la idea tiene mucho que ver con Don Quijote. En un lugar de Nueva York, de cuyo nombre no quiero acordarme, no hace mucho tiempo que vivía un adolescente, apasionado de los cómics, que de tanto leer y leer historias de superhéroes, un día acaba poniéndose un uniforme y lanzándose a desfacer entuertos bajo la identidad de Kick Ass. Aunque en un principio recibe muchos porrazos cuando intenta que los delincuentes no roben, lo cierto es que a base de fuerza de voluntad, acaba convirtiéndose en un personaje popular. Kick Ass se unirá a Big Papi y Hit-Girl, pareja de superhéroes formada por un ex policía y su hija, que se enfrentan al peligroso mafioso Frank D’Amico y a sus hombres.

Vaughn logra un ritmo trepidante, y aprovecha que tiene a Mark Strong, que repite su registro de supervillano, y no resulta cansino, a pesar de que su papel va en la misma línea que sus trabajos en Robin Hood y Sherlock Holmes. El resto del reparto da la talla, incluso Nicolas Cage, en el papel de Big Papi. Matthew Vaughn rueda con buen ritmo, las partes que parodian el cine de superhéroes tienen su gracia, e incluye buen número de referencias a personajes conocidos como Batman o Spider-Man.

Sin embargo, su tono gamberro combina la zafiedad y el lenguaje de las películas adolescentes tipo Supersalidos, con una violencia y humor negro que hasta hace poco sólo se veía en el gore de serie B. Esto aleja la cinta de gran parte del público, y señala una tendencia de Hollywood un tanto preocupante. Además, aunque el planteamiento tiene algo de tirón, finalmente acaba en una sucesión de secuencias de acción y ya está.