País: España
Creador: Israel del Santo
Intérpretes: Eduardo San Juan, Nacho Acero, Aitana Sánchez-Gijón, Miguel Lago, Denis Gómez
Duración: 1 temporada de 8 capítulo de 45-60 minutos
Emisión en España: Movistar+
Público adecuado: +16 años (V)
Calificación: 5/10
Leyenda negra y anacrónica a la vista
En el año 2014 Israel del Santo creó la serie Templarios para History Channel. Esta producción utilizaba música moderna, recreaciones históricas y entrevistas a un grupo bastante peculiar de “expertos”. Un verdadero desastre con una falta notable de rigor histórico y un tono videoclipero coronado por algunas intervenciones de supuestos conocedores que exhibían argumentos y vestuario de jugadores de rol mas que de historiadores de prestigio. Para Conquistadores Adventum, este mismo director ha contado con un presupuesto mucho más elevado gracias a la producción de Movistar+. Visualmente la serie está en otra órbita de Templarios. Se nota el presupuesto en el vestuario, el diseño de arte y las localizaciones. También en el guión se ha optado por eliminar las intervenciones de comentaristas peculiares y se ha centrado en la recreación de los primeros conquistadores de América. El reparto logra un buen nivel interpretativo en el que destaca la presencia de Aitana Sánchez-Gijón como la reina Isabel la católica. La inagotable voz en off que narra la historia es el primer error de bulto de la serie. Ese personaje omnisciente habla como un historiador del siglo XXI que desdeña todo lo sucedido en España en los denominados siglos de oro con un tono de voz despreciativo y cínico, muy en la línea del utilizado (brillantemente), en la serie Narcos. Lo de Inocencio VIII en versión mutante muriendo en la cama mientras se bebe la sangre de niños recién sacrificados en una cámara frigorífica es dantesco. A pesar de que escritores de reconocido prestigio como el italiano Vittorio Messori o el norteamericano Stanley G. Payne han demostrado la falsedad de estas leyendas, no dejan de aparecer nuevos difusores de ese tipo de historiografía. El tono de la serie es tan monótono y falto de emoción, la descripción de personajes es tan maniquea e inhumana que el relato resulta tedioso a pesar de tratarse un argumento fascinante, con innegables claroscuros pero con un espíritu idealista y audaz que aquí se desprecia con una simpleza insultante. Series como Conquistadores Adventum o la infumable Reinas producida por José Luis Moreno tienen una gran ventaja: hacen brillar más aún a títulos que sí han cambiado la ficción en nuestro país. Nos ayudan a ser más conscientes de la brillantez y veracidad de trabajos a contracorriente realizados en series como Isabel, El Ministerio del Tiempo, Carlos Rey Emperador o Tiempo entre costuras. Sólo hace falta ver el representativo y tosco retrato que se ofrece de la reina Isabel en esta nueva serie. Recuerda demasiado en su severidad y ambición simplista al que interpretó Sigourney Weaver en una de las peores películas de Ridley Scott (1492. La conquista del paraíso), un film subvencionado por el Gobierno de España realizado como “homenaje” al V Centenario de la Colonización. Han pasado los años, y la historia aún no deja de repetirse.Claudio Sánchez