«¿Qué te hemos hecho Señor, para merecer esto?» se ríe con los tópicos interraciales y consigue 5,6 millones de espectadores

Fenómeno cinematográfico, social y cultural, ¿Qu’est-ce qu’on a fait au bon Dieu? (¿Qué te hemos hecho Señor, para merecer esto?), la última película de Philippe de Chauveron, una fábula humorística sobre las desventuras de una familia acomodada, católica y conservadora, cuyas hijas contraen matrimonio con franceses de la ¿diversidad?, que es la formula convencional para hablar de franceses negros, musulmanes, judíos, asiáticos…

Claude y Marie Verneuil son burgueses acomodados, católicos practicantes, que han triunfado en la vida y esperan ser abuelos de una familia tradicional. Isabelle, la mayor, se casa con un francés de origen norteafricano, árabe, musulmán, Rachid Ben Assem, crecido en un suburbio nada acomodado. Odile se casa con un parisino judío, David Benichou, educado en los barrios parisinos más modestos, en una escuela pública. Ségolène se casa con un francés hijo de antiguos boat-people, Chao Ling, crecido en la periferia del distrito XIII, Chinatown-sur-Seine.

Los Verneuil esperan que Laure, la menor, encuentre un novio como Dios manda. En su amargada soledad de padres que intentan cohabitar mal que bien con los esposos de sus hijas, los Verneuil se preguntan, cuando están solos: ¿¿Qué hemos hecho, Señor, para merecer esto…??.

Hasta que la hija menor les anuncia que ha encontrado novio… Los padres la interrogan aterrorizados: ?¿No será un gitano rumano?? ¿No?. ¿No será sudaca de izquierdas?? ¿No?. Intentando suavizar la noticia, Odile avanza un dato positivo: ¿Los padres de mi novio están muy bien situados y son de muy buena familia?. Ahhhhhhhh, respira el padre, aliviado. ¿Si?, continúa Odile: Son ¿católicos practicantes?. ¡Genial! respira la madre.

Odile olvida decir que su novio es negro. Y sus padres son burgueses acomodados en Costa de Marfil. El novio de Laure tiene con sus padres un problema semejante. Cuando les anuncia que tiene una novia francesa, el padre responde aterrorizado: ¡Qué dices! Los franceses son todos ateos y de izquierdas. Tu debes buscarte una chica de tu pueblo, negra, católica, de derechas?.

Los padres del novio de Laure se tranquilizan provisionalmente cuando les dice que sus futuros suegros no son de izquierdas y van a la misa todos los domingos.

Sin embargo, la preparación de la boda de Laure Verneuil se transforma en una batalla campal, etre familias francesas de tan variopinto color. En vísperas de la boda, el padre de Odile y el padre del novio de Odile deciden hablar de hombre a hombre. Y se marchan a comer, juntos. Primero estalla una gran crisis, acusándose el uno al otro de racistas, izquierdistas y ateos. Luego, el padre negro y el padre blanco descubren que tienen algunos gustos comunes. Y se emborrachan juntos…

Y siguen durmiendo la mona cuando el cura de Chinon los espera para bendecir con una misa cantada el matrimonio de Laure y su novio negro. Siguen minutos de angustia. Hasta que los padres llegan en el último minuto, contentos, amigos, para dar el brazo al hijo y la hija que se casan. Cuando la nueva pareja se marcha de viaje de bodas… los Verneuil se quedan solos, al fin, en su lecho matrimonial. Y son felices. El yerno árabe y el yerno judío se han asociado en una empresa común: y triunfan. El yerno vietnamita es un genio de las finanzas. El yerno negro está llamado a triunfar, como actor, en un teatro parisino.

La historia se ha convertido en uno de los grandes éxitos de crítica y taquilla de las últimas décadas. 5,6 millones de franceses han aplaudido esa fábula humorística sobre las metamorfosis sociales y culturales de Francia.

Fuente: hoycinema.abc.es