[1]efectivamente, nosotros se la tenemos que prestar. Afortunadamente no será difícil introducirnos en este simpático juego que premia la creatividad y el esfuerzo. Con algo de imaginación, dedicación y paciencia veremos los frutos de nuestro trabajo, los cuales también beneficiarán a la comunidad.
El objetivo será explotar y hacer crecer nuestros cultivos e ir aumentado nuestro número de animales y su productividad. Para arrancar contaremos al principio con opciones de personalización de nuestra granja, guiados por sencillos tutoriales. El resto dependerá de nuestra voluntad y capacidad de curro, también de nuestra soltura para relacionarnos. En nuestro camino tendremos que interactuar con los vecinos, cada uno con su carácter y caprichos, Con éstos podremos comerciar y comprar abonos, pienso, semillas y útiles herramientas para desarrollar mejor nuestras labores agrícola y ganadera. También nos vendrá muy bien hacer favores a los demás (encontrar medicinas, cultivar un tipo determinado de planta, etc), ganaremos reputación y de paso nuestra solidaridad hará que también el pueblo crezca. Todos felices y contentos por el bien de la comunidad.
El juego se disfruta bajo una mecánica simple, pero a medida que avanzamos se vuelve más complejo y exigente. No obstante se trata de obtener un rendimiento y este es directamente proporcional a nuestro empeño. Como la vida misma. Claro que hay circunstancias necesarias de manejar. Los horarios para sembrar y recoger la cosecha, las condiciones climatológicas, las estaciones del año… son factores a tener en cuenta por cualquier granjero que se precie. La iniciativa y la disciplina serán valores muy a tener en cuenta en el jugador. También el amor hacia esos otros seres vivos, los animales que ocupan nuestros establos: gallinas, vacas, cabras, caballos y burros. Si los tratamos como se merecen, nos devolverán el cariño en forma de rica leche y magníficos huevos. Quid pro quo.
El tono amable y desenfadado de este nuevo ‘Harvest Moon’ nos conduce a reflexionar sobre las cosas hermosas de la vida, aquellas que debemos proteger a diario, o recuperar su esplendor en caso de haberse perdido. Con imaginación y creatividad el jugador podrá crear una alberca o un canal de agua para recuperar el verdor y la fertilidad de una tierra. En definitiva, la simulación de vida virtual (donde hasta tendremos tiempo para el asueto yéndonos de pesca e incluso formar familia) en una curiosa fusión con la historia mágica propuesta en el juego. Una delicia abierta a todas las edades.
Texto: Nina Cuadrado
Videojuego: Harvest Moon: El pueblo del Árbol Celeste
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Ficha:
Edita: Natsume
Género. Simulado de vida, estrategia
Plataformas: 3DS, 2DS
Edad recomendada: 3+
La serie ‘Harvest Moon’ nos invita una vez más a experimentar la vida granjera, pero esta vez dentro de un contexto especial marcado por un encantador argumento. La tierra no da frutos, está estéril y la Diosa de la Cosecha necesita ayuda para hacerla nuevamente fértil. Y [1]efectivamente, nosotros se la tenemos que prestar. Afortunadamente no será difícil introducirnos en este simpático juego que premia la creatividad y el esfuerzo. Con algo de imaginación, dedicación y paciencia veremos los frutos de nuestro trabajo, los cuales también beneficiarán a la comunidad.
El objetivo será explotar y hacer crecer nuestros cultivos e ir aumentado nuestro número de animales y su productividad. Para arrancar contaremos al principio con opciones de personalización de nuestra granja, guiados por sencillos tutoriales. El resto dependerá de nuestra voluntad y capacidad de curro, también de nuestra soltura para relacionarnos. En nuestro camino tendremos que interactuar con los vecinos, cada uno con su carácter y caprichos, Con éstos podremos comerciar y comprar abonos, pienso, semillas y útiles herramientas para desarrollar mejor nuestras labores agrícola y ganadera. También nos vendrá muy bien hacer favores a los demás (encontrar medicinas, cultivar un tipo determinado de planta, etc), ganaremos reputación y de paso nuestra solidaridad hará que también el pueblo crezca. Todos felices y contentos por el bien de la comunidad.
El juego se disfruta bajo una mecánica simple, pero a medida que avanzamos se vuelve más complejo y exigente. No obstante se trata de obtener un rendimiento y este es directamente proporcional a nuestro empeño. Como la vida misma. Claro que hay circunstancias necesarias de manejar. Los horarios para sembrar y recoger la cosecha, las condiciones climatológicas, las estaciones del año… son factores a tener en cuenta por cualquier granjero que se precie. La iniciativa y la disciplina serán valores muy a tener en cuenta en el jugador. También el amor hacia esos otros seres vivos, los animales que ocupan nuestros establos: gallinas, vacas, cabras, caballos y burros. Si los tratamos como se merecen, nos devolverán el cariño en forma de rica leche y magníficos huevos. Quid pro quo.
El tono amable y desenfadado de este nuevo ‘Harvest Moon’ nos conduce a reflexionar sobre las cosas hermosas de la vida, aquellas que debemos proteger a diario, o recuperar su esplendor en caso de haberse perdido. Con imaginación y creatividad el jugador podrá crear una alberca o un canal de agua para recuperar el verdor y la fertilidad de una tierra. En definitiva, la simulación de vida virtual (donde hasta tendremos tiempo para el asueto yéndonos de pesca e incluso formar familia) en una curiosa fusión con la historia mágica propuesta en el juego. Una delicia abierta a todas las edades.
Texto: Nina Cuadrado
[1]efectivamente, nosotros se la tenemos que prestar. Afortunadamente no será difícil introducirnos en este simpático juego que premia la creatividad y el esfuerzo. Con algo de imaginación, dedicación y paciencia veremos los frutos de nuestro trabajo, los cuales también beneficiarán a la comunidad.
El objetivo será explotar y hacer crecer nuestros cultivos e ir aumentado nuestro número de animales y su productividad. Para arrancar contaremos al principio con opciones de personalización de nuestra granja, guiados por sencillos tutoriales. El resto dependerá de nuestra voluntad y capacidad de curro, también de nuestra soltura para relacionarnos. En nuestro camino tendremos que interactuar con los vecinos, cada uno con su carácter y caprichos, Con éstos podremos comerciar y comprar abonos, pienso, semillas y útiles herramientas para desarrollar mejor nuestras labores agrícola y ganadera. También nos vendrá muy bien hacer favores a los demás (encontrar medicinas, cultivar un tipo determinado de planta, etc), ganaremos reputación y de paso nuestra solidaridad hará que también el pueblo crezca. Todos felices y contentos por el bien de la comunidad.
El juego se disfruta bajo una mecánica simple, pero a medida que avanzamos se vuelve más complejo y exigente. No obstante se trata de obtener un rendimiento y este es directamente proporcional a nuestro empeño. Como la vida misma. Claro que hay circunstancias necesarias de manejar. Los horarios para sembrar y recoger la cosecha, las condiciones climatológicas, las estaciones del año… son factores a tener en cuenta por cualquier granjero que se precie. La iniciativa y la disciplina serán valores muy a tener en cuenta en el jugador. También el amor hacia esos otros seres vivos, los animales que ocupan nuestros establos: gallinas, vacas, cabras, caballos y burros. Si los tratamos como se merecen, nos devolverán el cariño en forma de rica leche y magníficos huevos. Quid pro quo.
El tono amable y desenfadado de este nuevo ‘Harvest Moon’ nos conduce a reflexionar sobre las cosas hermosas de la vida, aquellas que debemos proteger a diario, o recuperar su esplendor en caso de haberse perdido. Con imaginación y creatividad el jugador podrá crear una alberca o un canal de agua para recuperar el verdor y la fertilidad de una tierra. En definitiva, la simulación de vida virtual (donde hasta tendremos tiempo para el asueto yéndonos de pesca e incluso formar familia) en una curiosa fusión con la historia mágica propuesta en el juego. Una delicia abierta a todas las edades.
Texto: Nina Cuadrado