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Videojuegos: Chimparty

 

 

Gran idea la de apostar por una tecnología al alcance de casi cualquiera hoy en día: los móviles. Porque no todos tienen mandos de consola, pero sí smartphone o tableta, PlayStation aprovecha esto para dar títulos multijugador local que, además, son aptos para casi todos los públicos.
El caso que nos ocupa, desarrollado por los mismos de Frantics, es un juego competitivo y, en ocasiones, cooperativo, ya que a veces hay que jugar contra todos los demás y otras, unirse a un compañero para derrotar a un equipo compuesto por otros. Chimparty está protagonizado por locos chimpancés que deben llegar al final del tablero de juego, para lo que deben superar con la máxima puntuación posible una serie de minijuegos. Como el videojugador más hábil tiene todas las de ganar, se añade un enorme componente de azar: hay casillas que te hacen retroceder y avanzar posiciones y, además, si vamos a parar a una en la que ya hay alguien, nos veremos obligados a ir a la anterior si estamos retrocediendo o a la posterior si estamos avanzando. De esta forma se incentiva la idea de que nada está ganado y cualquier cosa puede pasar.
El manejo es extremadamente sencillo: pulsar un botón en la app correspondiente y hacerlo en el momento oportuno. Con eso manejamos a nuestro protagonista y sus locos movimientos. Las victorias nos darán acceso a objetos de personalización cuyo uso es estrictamente estético: no reportan ventajas de ningún tipo.
Si no contamos con más personas para jugar, podemos optar por el estilo de juego en solitario, en el que huimos de un orangután que nos quiere dar caza. Y si lo que queremos es sencillamente disfrutar de juegos en orden aleatorio o bien de una simple partida, también podremos, así como elegir el orden de los juegos. Hay un total de 18 minijuegos con 90 niveles diferentes, así que la variedad está garantizada.
A nivel técnico, el título cumple perfectamente: gráficos muy coloristas, animaciones de buena calidad, música animada y un muy correcto doblaje hacen que todo sea adecuado y funcione bien. Sin embargo, hay dos peros: no poder sumarse a una partida ya empezada, como sí se puede hacer en los de LEGO, y la necesidad de bajarse otra app para jugar, pues no vale ninguna de anteriores títulos.
En general se trata de un juego desenfadado y pensado para todos los públicos, aunque el nivel de desorden al que se puede llegar con cuatro jugadores a la vez puede alejarlo de los más inexpertos. Estupendo para pasar un buen rato con amigos.