Eduardo Noriega interpreta a Tomás Sóller un profesor de psicología especializado en criminología. Mientras imparte unos cursos en la universidad se cometen una serie de asesinatos en serie, cuando la policía acude Tomás no tendrá mas opciones que ofrecerse a la policía a cargo de la investigación Eva Hernanadez (Celia Frejeiro). Junto a el equipo de investigadores irán resolviendo diferentes crímenes y buscando a un asesino en serie que parece tener relación en todos y cada uno de ellos.

Emisión: Martes 22:00

Cadena: Telecinco

Género: Ficción Policíaca,

Contenido:Acción 3, Lenguaje soez 2, Sexo 2

Público: 16+

Critica:

Homicidios, la nueva serie policíaca es el resultado de la fórmula tan de moda en Telecinco, intentar aunar lo mejor de la ficción estadounidense y darle un toque patrio, a ver si de chiripa funciona la formula (véase Cheers, por ejemplo).

Y es que cuando el espectador se sienta después de una dura jornada a ver la televisión y se encuentra con Homicidios, su corazón se ensancha y cree estar ante todo un hito en la televisión de nuestro país. Una serie que posee un estética algo oscura, en la que la iluminación, la fotografía, las tomas tienen un peso y no sólo eso son un elemento a tener en cuenta y con el que juega la serie para así dotarse de mas realismo y ser más cercana al espectador.

Ante tal espectáculo, uno comienza a hacerse ilusiones pero estas se desvanecen una vez que los protagonistas comienzan a desarrollar un guion bastante plano, con historias poco complejas. La conexión entres los personajes es pobre, se limita solo a la resolución del caso, en vez de entrelazarse con temas más humanos, relaciones personales o afectuosas, perdiendo la historia profundidad y por tanto interés. Los diálogos, aderezados con algún que otro chiste malo, se quedan cortos, son demasiado pobres. Y ante tal situación como viene siendo costumbre en los seriales de Telecinco, se echa mano a la carnaza y se colocan escenas subidas de tono para intentar captar la atención del espectador.

En lo referente a las actuaciones, algún que otro personaje secundario llega a ser ridículo, otro sincerara mente no se sabe si es actor o figurante y Eduardo Noriega parece estar jugando al parchís.

Resumiendo, es una serie que se deja ver, algo entretenida si no hay nada más que ver en la televisión. Los amantes de las míticas CSI, Mentes Criminales, Caso Abierto, etc. no aguantaran sentados más de 5 minutos. El único aspecto interesante es el técnico, que si esta logrado. Pero los guionistas y actores se encargan de que quede en segundo plano.