Christian todavía no ha superado el abandono de su mujer. Anna ha empezado una nueva vida en Argentina como representante de futbolistas. Sale con el jugador estrella de los Boca Juniors, Juan Díaz. Sin embargo, después de una fase de shock con depresión profunda, Christian decide acompañar a su hijo a Argentina y recuperar a su esposa.

Director: Ole Christian Madsen

Intérpretes: Paprika Steen, Anders W. Berthelsen, Jamie Morton, Adriana Mascialino, Sebastián Estevanez, Dafne Schiling, Mikael Bertelsen

Guión: Ole Christian Madsen, Anders Frithiof August

Duración: 99′

Género: Comedia, Romántica

Estreno DVD: 18/09/2013

Público: +18

Valoración: **

Contenidos (de 0 a 6):

Humor: 3

Acción: 3

Amor: 1

Violencia: 0

Sexo: 2

Crítica:

Es difícil contrastar dos culturas tan distintas como la danesa y la argentina sin caer en tópicos, más todavía cuando la producción la realiza uno de los interesados, el país escandinavo. Los argentinos son sentimientos e impulsos mientras que los daneses son razón y reflexión. Unos se paralizan con el fútbol y se encomiendan a su Virgen, mientras los otros saborean una copa de vino y leen a Kierkegaard. Así lo relata Ole Christian Madsen en Noche de vino y copas.

Un éxito arrollador en Dinamarca, a pesar de converger en ella demasiados clichés. Probablemente, Noche de vino y copas no haya gustado tanto en el país latinoamericano. El arranque promete. Un narrador omnisciente cuenta irónicamente cómo el protagonista se desmorona y se arruina económicamente ante la partida de su amada. Sin embargo, una vez Christian pone un pie en Buenos Aires, la historia se teje con sucesivos gags alimentados de tópicos o groserías o una visión folclórica de la religión católica.

En una parte del metraje, se atisba una reflexión más profunda sobre el amor y la convivencia matrimonial, que acaba desmoronándose con el avance de la trama. Una lástima, ya que a un tema tan universal como el amor conyugal se le puede sacar mucho jugo, pero cuando se trata con humor inteligente y coherencia; y, por supuesto, sin tantos estereotipos culturales.


 

Fuente: Montserrat Bros (www.taconline.net)