Ficha: 100 min. | Drama Público apropiado: Jóvenes Año: 2016 País: España Dirección: Marcel Barrena Intérpretes: Dani Rovira, Karra Elejalde, Alexandra Jiménez, Maria de Medeiros, David Verdaguer, Gael Díaz, Andrés Velencoso, Clara Segura La vida de Ramón parece ir a las mil maravillas. Joven, casado, con un hijo y otro en camino, es un ejecutivo experto en marketing muy bien valorado en su empresa. Pero el diagnóstico de una esclerosis múltiple le cambia la vida. Empieza a notar las limitaciones de la enfermedad, aunque logrará sobreponerse gracias al apoyo de la familia y a una meta insólita: prepararse físicamente para participar en un triatlón y hacer así un “Iron Man”. 100 metros –una alusión a la predicción hecha al protagonista, de que llegaría el momento de que sería incapaz de recorrer por sí solo esa distancia– es una película inspirada en los hechos reales vividos por Ramón Arroyo y su familia, cargada de buenas intenciones, que desea aleccionar sobre las dificultades de sobrellevar una enfermedad degenerativa, para el afectado y los que le rodean, con el propósito de transmitir esperanza. Una meta loable, y a la que la productora nunca ha sido ajena, Filmax ha producido previamente la exitosa serie televisiva sobre niños con cáncer Pulseras rojas. Marcel Barrena, guionista y director, había abordado el mundo de los enfermos que se proponen metas increíbles en el documental Mundo pequeño. Aquí reincide en el tema, pero en el terreno de la ficción, buscando combinar el dramatismo de la trama con algo de humor que permita respirar; un propósito al que ayuda la presencia en el reparto de Dani Rovira y Karra Elejalde, que vuelven a hacer de yerno y suegro tras Ocho apellidos vascos y su secuela. Curiosamente, lo que mejor funciona es la interacción de Rovira con auténticos enfermos de esclerosis, mientras recibe tratamiento, pasajes que recogen algunos de los miedos y oscuridades que se presentan. En cambio la relación con la esposa y el hijo no está demasiado desarrollada, mientras que se da demasiado juego al tencontén entre el protagonista y su suegro Manolo, muy distintos y que no se llevan bien, pero que acaban beneficiándose mutuamente de su compañía, con el segundo ejerciendo de entrenador. Toda la subtrama amorosa de Manolo, su viudez y un nuevo interés amoroso, el background de ciclista, resulta demasiado convencional y traido por los pelos. Por supuesto, el tramo final se adscribe al subgénero del drama deportivo, la competición, con la emoción consiguiente de si el protagonista logrará culminar su sueño. Firma: José María Aresté