Ficha:

100 min. | Comedia

Público apropiado: Jóvenes-adultos

Año: 2015

País: España

Dirección: Álex de la Iglesia

Intérpretes: Raphael, Hugo Silva, Pepón Nieto, Mario Casas, Blanca Suárez, Carmen Machi, Santiago Segura, Carlos Areces, Enrique Villén, Jaime Ordóñez, Terele Pávez, Carolina Bang, Luis Callejo

El cine de de Álex de la Iglesia podría describirse como una larga broma gamberra que no cesa, al menos en lo que se refiere a sus películas más claramente adscritas al género de la comedia. Y en este terreno alcanzó su cota más alta hace ya veinte años, con El día de la bestia. Luego ha entregado títulos con destellos, buenas ideas no perfectamente resueltas.

Mi gran noche hace pensar en Muertos de risa, aquella película sobre dos cómicos televisivos que se llevan fatal. Aquí tenemos un programa para la pequeña pantalla, un canal está grabando en octubre su programa especial de fin de año, para el que cuenta con un divo de la vieja escuela, Alphonso –el cantante Raphael que ha aceptado el envite de De la Iglesia de ofrecer una versión pasada de rosca de sí mismo–, y con una estrella juvenil emergente, Adanne. Además seguimos las andanzas de múltiples personajes, algunos ligados a los dos citados por cuestiones de paternidad, otros son los figurantes del programa, en especial el parado José, que ha encandilado a una joven guapísima por misteriosas razones, y que está pendiente de su algo extravagante madre. En las proximidades del programa, en clave de crisis, protestan trabajadores despedidos, mientras el sinvergüenza productor televisivo piensa sólo en llenar su bolsillo.

El director da muestras de una gran pericia técnica en su manejo de un reparto coral y en el endiablado ritmo de la narración, aunque de vez en cuando uno tiene la sensación de estar en medio de un confuso barullo. En cualquier caso los chistes orquestados con su coguionista habitual Jorge Guerricaechevarría no son la repanocha en lo que a gracia se refiere, quizá por su diverso tono, algunos de física brutalidad, otros de tipo sexual, o de guerra de sexos. Hay muchas referencias cinematográficas, la más clara es la espuma de jabón que remite a El guateque de Peter Sellers, una cinta bastante más lograda, o las menciones no nuevas a La guerra de las galaxias y a Darth Vader. Sólo ver a Mario Casas con su pelucón, a Raphael estando, o Terele Pávez con su cruz de Caravaca produce hilaridad, pero esto no basta para armar una buena película.

 

Firma: José María Aresté