El escándalo Murdoch y del diario sensacionalista ‘News of The World’ desnuda el compincheo entre prensa y política, los intereses del negocio de la televisión y el poder de los políticos para conceder licencias o permitir la concentración: BSkyB en Gran Bretaña o Mediaset en España. La convergencia digital trae otra amenaza: el poder de los dueños de las redes de telecomunicaciones y los magnates digitales. Limitarlos, ampliar la competencia, frenar los oligopolios, garantizar la neutralidad de internet y la tecnológica, y fortalecer los derechos de los usuarios es indispensable. La discusión en el Congreso de la Ley de Telecomunicaciones es un momento clave para una sociedad de la información más libre, abierta y con futuro. España va retrasada en cibersociedad. Comentamos mucho e innovamos poco. El informe eEspaña nos sitúa de nuevo por debajo de la media europea. El recorte de fondos del Plan Avanza 2 se nota. Años de subvenciones vuelven a demostrar que la política no es solo dinero. Falta un mercado competitivo y abierto, sin tanto oligopolio y barreras de entrada: licencias, costes legales y de derechos… Abrir el mercado y flexibilizar las leyes no para proteger a negocios obsoletos ni a los grandes de la industria, sino a los innovadores, a los nuevos negocios y a los usuarios, perjudicados con precios altos y falta de oferta. Solo se salva el móvil por la competencia. La neutralidad de la red para evitar el control de los contenidos y servicios -de la telefonía por internet al audiovisual- por las grandes telecos, el acceso a internet como un derecho humano sin bloqueos (como defienden Naciones Unidas o la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) y la transparencia y agilidad en los contratos son esenciales. También la flexibilización de los derechos de autor y plantearse un servicio público digital con acceso libre a todos los contenidos y servicios pagados con dinero público. Es hora de una política comprometida con los ciberciudadanos y menos dependiente de los intereses de magnates y grand es corporaciones, sean de los medios o de las telecomunicaciones.

Fuente: Juan Varela (El Diario Vasco, 21-7-2011)