El mejor simulador de baloncesto regresa con una edición poco novedosa pero repleta de calidad.


La crítica del principiante

Cuando un producto es tan redondo como NBA 2K, el margen de mejora es muy pequeño. Ya lo vimos en la edición del año pasado, cuyas novedades eran poco significativas respecto a la edición de hace dos años, la más completa de todas. ¿Vale la pena entonces este nuevo título?

El sí es rotundo, pero… La ausencia de novedades no exime que estamos ante el excelente título de cada año. Sin embargo, hemos de precisar que la pandemia del COVID-19 unida a la llegada de las nuevas consolas, ha provocado que esta entrega sea muy parecida a la anterior ¿Qué ofrece?

Hasta el estrellato y más allá

Una vez más, la opción que más nos ha gustado es Mi Carrera. Nos encargamos de crear a nuestro propio jugador y acompañarlo a lo largo de toda su carrera deportiva. Como es tradición, esta opción cuenta con una historia cinemática a través de la cual seguiremos la evolución de Junior desde la escuela hasta la NBA. No resulta demasiado larga, siendo un pretexto ideal para engancharnos a este modo, pero cuenta con un argumento muy interesante. Completada la parte narrativa, se abre ante nosotros El Barrio, que esta vez cuenta con una ambientación muy estival.

Por si no habéis jugado a la saga anteriormente, os diremos que El Barrio es un entorno vivo e interactivo por el que nos podemos mover libremente con nuestro personaje. A grandes rasgos es una pequeña ciudad llena de vida –pues la compartimos con otros jugadores- en la que podemos realizar todo tipo de tareas deportivas y extradeportivas (como ir a tiendas de ropa, comprar zapatillas deportivas, hacer ejercicio en gimnasios…) Todo está enfocado para que nuestro jugador vaya desarrollando sus habilidades por sus calles. Y, por supuesto, todo lo que hagamos repercutirá en nuestro personaje, pudiendo mejorar sus habilidades de distintas maneras.

Mi Carrera es solo el principio

Mi Carrera es solo el principio. Tenemos muchas más opciones que os presentamos. La más importante es Mi Equipo. Viene a ser el equivalente del Ultimate Team de Fifa y nos permite jugar partidos de todo tipo. En esencia, se basa en el coleccionismo de cromos para poder construir el mejor equipo posible con el que competir. Las cartas representan jugadores con estadísticas concretas y las hay de muchos tipos -que iremos desbloqueando a medida que jugamos o previo pago-.

Como añadido encontramos nuevos Pases de temporada -que se renuevan cada varias semanas de forma gratuita- con desafíos y retos que nos otorgan jugosas recompensas. Son muy entretenidos porque nos instan a superarlos, por ejemplo, con un tipo de cartas/jugadores concretos. Esto otorga mayor complejidad y diversión, puesto que tendremos que poner en el parqué a todo tipo de jugadores. Otra novedad interesante es Limitado, opción en la que deberemos adaptarnos a las reglas que nos pongan cada fin de semana.

Mucho más para todo el año

Encontramos muchas más opciones que complementan un juego gigantesco. Mi GM (General Manager) nos permite manejar una de las franquicias de la NBA desde varias perspectivas: desde la pista o los despachos. Es otra opción muy entretenida. Vendría a ser la vertiente de manager deportivo del juego. Es curioso porque la nueva temporada no empezará hasta principios del año que viene, por lo que los partidos no serán reales.

Por último, la WNBA o Liga Femenina Estadounidense repite un año más. Esto, que podría parecer algo anecdótico, no lo es. Jugar a baloncesto femenino o masculino en NBA 2K20 es completamente diferente. La NBA, por su parte, es más física y los partidos tienen un ritmo más alto y rápido, con más mates y acciones espectaculares. En la WNBA, los partidos son más tácticos y lentos, con un estilo claramente diferenciado.

Sintiendo el parqué

La saga 2K siempre ha destacado por su propuesta jugable desde tiempos de Dreamcast. La fórmula se ha ido redefiniendo cada vez más, al punto de que es capaz de plasmar los partidos de la NBA con la intensidad, el dinamismo y la exigencia real.

En esta edición se ha introducido un cambio importante en los lanzamientos. Hasta ahora debíamos fijar la potencia, ahora también acertar en la dirección. Realmente es complicado hacerse con los controles. De hecho, ya se ha lanzado una actualización que lo suaviza un tanto. Desde nuestro punto de vista, no hacía falta cambiar lo que ya funcionaba, si bien los más puristas agradecerán este acercamiento al realismo. También se han introducido nuevas animaciones en las colisiones entre jugadores y en los rebotes.

I love this game

En el apartado visual y sonoro solo diremos que mantiene el excelente nivel de otros años. Todos los detalles, desde las introducciones previas a los partidos, las animaciones e incluso el sudor de los jugadores, nos hace sentir como si estuviéramos en la misma pista.

Volvemos con los micropagos

Una vez más, los micropagos siguen estando muy presentes. Es cierto que podemos disfrutar del juego igualmente sin pagar más, pero se nota muchísimo que está pensado para que pasemos por caja o, por el contrario, dediquemos horas y horas jugando.

Conclusiones

NBA 2K21 es un juego continuista respecto a lo que vimos el año pasado. Quizás no aporte grandes novedades, pero no por ello deja de ser un título excelente. Veremos qué le depara la próxima generación.