Mathew Heineman es un realizador experto en documentales por los que ha sido muchas veces premiado: Cartel Land (2015), City of Ghosts (2017). En 2018 hizo un intento distinto con una película basada en una historia real muy relacionada con el documental: La corresponsal, protagonizada por una brillante Rosamund Pike. El personaje era fascinante y su historia también, pero el formato era muy poco atractivo. Así que Heineman ha vuelto al documental. Y ha hecho bien.
Tiger Woods ha sido durante muchos años el deportista mejor pagado del mundo, algo que generaba desconcierto. Está claro que es uno de los mejores jugadores de golf de la historia de ese deporte, pero llamaba la atención que ganase más dinero que Leo Messi, Roger Federer o Kobe Bryant.
Esta docuserie de dos capítulos de 90 minutos de HBO muestra el verdadero espectáculo del golf, más allá de la exclusividad de un deporte caro y aparentemente estático. El director cuenta con las declaraciones de Tiger Woods y su círculo más cercano que confían plenamente en él, permitiéndole que profundice en los aspectos más vulnerables de su personalidad. El viaje a ese submundo de adiciones y escándalos podría ser menos explícito en el segundo capítulo, aunque el director centra estos aspectos en un tramo intermedio de 15-20 minutos.
La narración es interesante a pesar de una cierta redundancia y una creatividad limitada. Pero el retrato tiene grises y vida propia, humanidad y una selección de sus mejores golpes magnífica. Un documental notable y definitivo sobre uno de los mejores deportistas de todos los tiempos.
Firma: Claudio Sánchez