Dersu Uzala (El cazador) (1975)

Historia de una amistad

Historia de una amistad

La historia de una hermosa amistad. Más allá de los hermosos parajes de Siberia donde transcurre la acción, magníficamente fotografiados. Más allá incluso de la necesaria advertencia, teñida de ribetes ecológicos, acerca de la pujante civilización que transforma los lugares más bellos en… otra cosa. El gozne sobre el que verdaderamente gira esta obra maestra de Akira Kurosawa es la maravillosa relación que se establece entre el capitán Vladimir Arseniev, explorador del ejército ruso, y Dersu Uzala, un nativo siberiano al que conoce casualmente, y que le sirve como guía en sus esfuerzos por trazar un mapa topográfico. Basada en una historia real, que plasmó en un diario el propio Arseniev, esta película, cuidadosamente restaurada, llega al DVD de la mano de Divisa. Y bien acompañada de interesantes extras.

Akira Kurosawa siempre ha demostrado ser un auténtico maestro en humanidad. Pero quizá fue en este film en el que alcanzó la cota más alta en el mencionado campo. Pues logra perfilar la enorme personalidad de Arseniev y, sobre todo, Uzala, de modo asombroso. Inicialmente, el cazador Uzala, que vaga por la estepa y bosque siberianos, parece un tipo más o menos pintoresco, una curiosidad viviente que resulta útil a los soldados rusos. Pero pronto Arseniev y los otros hombres descubren a un personaje de una pieza: sacrificado, amante de la naturaleza, capaz de poner en riesgo su vida para salvar al capitán. Todo ello contribuye a estrechar los lazos entre estos dos hombres.

Al mismo tiempo, en el film flota todo el rato una nube de tristeza, que se acrecienta, cuando las facultades de “jinete libre y salvaje” de Uzala empiezan su declive. El cazador interpreta el ataque de un tigre como la respuesta de la naturaleza al ataque del que está siendo objeto por parte del hombre. Su vista empieza a estar gastada. Arseniev, que se reencuentra con su viejo amigo tras muchos años, le ofrece techo: su casa es la casa de Dersu. Pero la adaptación al nuevo entorno no es fácil, como tampoco lo es aceptar la vejez.

Con toda justicia, la película se llevó el Oscar al mejor título extranjero, además del premio principal del Festival de Moscú. Coproducción ruso-japonesa, destaca el trabajo de los actores principales, Maksim Munzuk y Yuri Solomin, que unido a una fotografía deslumbrante, presenta de modo perfecto la amistad de estos dos hombres, y su muy especial comunión con la naturaleza.