Ficha: 123 min. | Acción | Fantástico Público apropiado: Jóvenes Año: 2016 País: EE.UU. Dirección: Duncan Jones Intérpretes: Travis Fimmel, Ben Foster, Paula Patton, Dominic Cooper, Toby Kebbell, Robert Kazinsky, Clancy Brown, Ben Schnetzer, Ruth Negga, Callum Keith Rennie Adaptación al cine del popular videojuego de los 90, que enfrenta a humanos y orcos, y que se convirtió en un auténtico fenómeno rolero que se jugaba on line en internet arrastrando a miles de fans. Es de esas películas en las que el no iniciado necesitaría leer previamente un manual de instrucciones, porque, pese a que el argumento no dejo de ser bastante simple, hay tal abundancia de nombres de reinos, tierras y personajes, que sólo transcurrida la mitad del metraje llega uno a aclararse quién es quién, y lo que hay en juego. Básicamente describe cómo los orcos han abandonado su mundo, en trance de dejar de existir, a través de una puerta mágica, con idea de establecerse en el mundo de los humanos, guerreando, claro está. Llane, el rey de Azaroth, reúne a sus consejeros en Valtormenta, y espera que un mago, el Guardián, le ayude a tomar sabias decisiones. Cuando capturan a Garona, mujer mitad humana, mitad orco, ésta se convierte en mediadora de una oferta de paz de una facción de los orcos, que no comparte los guerreros planes de sus líderes principales. Duncan Jones sorprendió con una eficaz pequeña película de ciencia ficción, Moon, y luego acertó con otra propuesta más comercial de viajes en el tiempo, Código fuente. Ahora, en esta superproducción, da la impresión de que le ha ocurrido algo parecido al traspiés de M. Night Shyamalan con la infumable Airbender: El último guerrero. Entrega una cinta de tipo fantástico, que parece querer emular a El Señor de los Anillos y Avatar, pero que fracasa porque no le logra insuflar el necesario aliento épico, circunstancia que la vuelve terriblemente tediosa. Los personajes están pobremente definidos, y su destino no logra enganchar al espectador, a quien poco importa lo que les pueda ocurrir. Es una lástima, porque hay un gran esfuerzo en el diseño de decorados y criaturas, y se incluyen vistosas batallas, pero tal despliegue se convierte en cansino, no sólo por la reiteración de algunos efectos, incluidos los rayos que parece exigir cualquier título de hechicería que se precie, sino por lo señalado anteriormente, poco nos importa realmente que un personaje perezca o sobreviva en las batallas. Por supuesto, como cabe imaginar, el film no da a pie a grandes interpretaciones, aparte de que los actores no son demasiado carismáticos, los que más suenan son Travis Fimmel, Paula Patton y Dominic Cooper, no precisamente estrellas de relumbrón. Firma: José María Aresté