Dirección: Paul Weitz

Intérpretes: Chris Massoglia, John C. Reilly, Salma Hayek, Ken Watanabe, Josh Hutcherson, Patrick Fugit, Willem Dafoe, Ray Stevenson, Michael Cerveris, Jane Krakowski, Jessica Carlson, Orlando Jones, Frankie Faison

Guión: Paul Weitz, Brian Helgeland

Duración: 110 min.

Público apropiado: Jóvenes

Género: Aventuras, Fantástico

Por decine21

 

elcircodelosextranosCMás vampiros. Ahora se trata de la adaptación de la obra «El tenebroso Cirque du Freak», publicada por Darren Shan en 2000 y que dio lugar a la llamada «Saga de Darren Shan». En ella, el autor relata en primera persona sus peripecias personales hasta convertirse en un vampiro a sus 16 años. El éxito editorial fue espectacular y hasta el momento ha conocido traducciones a 30 idiomas en 37 países. Se encarga de trasladar a la pantalla el fenómeno Paul Weitz, que cuenta con las más que aceptables referencias de In Good Company o Un niño grande.

Darren es el típico adolescente bueno, simpático, inteligente y… demasiado correcto. Porque si no fuera por la influencia de su amigo malote Steve, Darren sería el jovencito excesivamente perfecto, siempre obediente a sus padres, sin una palabra más alta que la otra, etc. Pero una noche ambos amigos acudirán furtivamente a un extraño espectáculo circense, donde verán seres rarísimos, absolutos monstruos de la naturaleza, como la mujer que se regenera rápidamente, el hombre sin costillas, la mujer barbuda, el hombre serpiente , etc. El jefe de este grupo es Crepsley, un tipo muy raro al que le gusta jugar con una araña muy venenosa… Obedeciendo a un impulso Darren robará la araña de Crepsley y ésta acabará picando a Steve. Y cuando Darren acuda a Crepsley para que le dé el antídoto que salavará la vida de su amigo, Crepsley le dirá que a cambio deberá convertirse en vampiro, como él…

A decir verdad, el film es un poquito disparate en su planteamiento, y certifica que lo que puede funcionar en una saga escrita no lo tiene por qué hacer en imágenes, y eso que Weitz ha contado con la colaboración del experimentado Brian Helgeland en la elaboración del guión. La trama se centra en la lucha entre vampiros buenos y vampiros malos, por lo que tampoco sorprende. En general, el conjunto denota falta de cohesión y entidad, aunque puede que, en definitiva, lo que escasea es la mínima seriedad requerida. Porque a diferencia incluso de la saga de Crepúsculo, por poner un ejemplo de renombre, aquí hay demasiada tendencia a la comedia inocua o a la aventurilla infantil, y los momentos de tensión son simplemente inexistentes, aun para un público muy joven. Así las cosas, casi todo el atractivo se concentra en la lograda atmósfera a lo Tim Burton, muy oscura y gótica, y en la colección de freaks que hacen acto de presencia, aunque incluso en ese punto tampoco destaca la originalidad (al margen de los horribles monstruitos de curiosa procedencia y cuyo aspecto es calcadito al del famoso Gollum). Por lo demás, en el reparto destacan algunos rostros conocidos, que no aportan demasiado, como los de Willem Dafoe o Salma Hayek, y entre os protagonistas destaca el joven Josh Hutcherson, célebre por su aparición en Un puente hacia Terabithia.