El Observatorio de Contenidos Televisivos y Audiovisuales (OCTA) ha pedido al Senado que la futura Ley Audiovisual prohíba los anuncios de contactos en horario de protección infantil y que establezca que la pornografía y violencia gratuita sólo puedan verse mediante sistema de vídeo bajo demanda.

El OCTA considera que estos aspectos deber ser recogidos «obligatoriamente» por la nueva norma en su trámite en la Cámara alta.

El Observatorio está integrado por más de 50 organizaciones sociales entre las que están, según la información de su web, los sindicatos CC.OO y UGT, el Defensor del Menor de Madrid o Cruz Roja y Unicef, entre otros.

Una de las reivindicaciones es que la pornografía y la violencia gratuita se emitan sólo a través de servicios audiovisuales a petición, con el fin de garantizar la protección de los menores y cumplir con la normativa comunitaria.

Pornografía fuera de las parrillas

Al observatorio le parece insuficiente la prohibición de emisión en abierto de porno y violencia gratuita incluida en el articulado original del Gobierno.

«No basta con poner estas emisiones codificadas en acceso condicional», ha explicado a Servimedia Alejandro Perales, portavoz del OCTA y presidente de la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC).

«La directiva comunitaria de Servicios de Medios Audiovisuales obliga a que estos contenidos sean difundidos sólo a petición, es decir, mediante el sistema de video bajo demanda y fuera de las parrillas de programación. Si no lo establece así la ley, tendríamos que ir a los tribunales europeos».

Responsabilidad sobre todo lo que se emite

Además, piden que las televisiones tengan responsabilidad administrativa sobre todo lo que emiten, tanto programas como comunicaciones comerciales, «evitando la impunidad recogida en el actual Proyecto de Ley».

A su vez, reivindican que la publicidad de bebidas alcohólicas de más de 20 grados siga sin ser emitida por televisión y que la de las bebidas alcohólicas de menor graduación no se emita antes de las 22 horas.

La OCTA también requiere que la regulación voluntaria de las cadenas no suponga un detrimento de la protección legal de los espectadores y que la comunicación comercial, en sus diferentes formas, incluida la autopromoción, no supere los 12 minutos por hora tal y como lo establece la directiva europea.

Que haya una amplia participación de organizaciones sociales en el Consejo Consultivo del Consejo Estatal de Medios Audiovisuales (CEMA) y que se garantice la gestión directa de las televisiones públicas y la producción propia de contenidos básicos en los informativos, para que cumplan su función de servicio público y divulgador de la cultura, son otras de las peticiones.

Por último, solicitan que se establezcan las condiciones necesarias como para permitir la viabilidad de las televisiones comunitarias en el nuevo entorno digital