Por Nico Rey (El Mundo)
La sombra de Chiquito de la Calzada es alargada. ¡Jaaaarl! Tanto que España entera se ha convertido, desde hace un tiempo y al filo de las 22:00 horas, en un ubérrimo ‘chistódromo’ en el que misses, supermodelos, toreros, actrices y humoristas del montón más lamentable muestran al mundo su gracejo en una sucesión de desactualizados chistes y coñas de muy distinto pelaje. Los sufren, en silencio, los chicos de Pablo Motos y ‘El hormiguero’, quienes han padecido una desbandada general de un público en busca de nuevas viejas emociones. Para que luego digan que la tele es una fábrica de ideas. Montan en Antena 3 el chiringuito y tardan en Telecinco un plis en tirar de Paz Padilla para repetir formato. Y tontunas. Y chistes peripatéticos. Y chistosos sin gracia.
Paz Padilla. Grande y omnipresente es esta Paz Padilla que compagina las suplencias en ‘Sálvame’ con este ‘¡Al ataque!’ de dificultosa digestión. La empleada del mes, y del año, en Telecinco acabará siendo esta Paz Padilla cuyo buenrollismo populista y sentido del humor barriobajuno nunca acabó de convencerme. A eso se le llama acaparar horas de tele. Buscan Paz y sus chicos, en realidad, al mejor ‘cuentachistes’ del panorama nacional. Ahí es nada. Sin embargo, andan bastante despistados. Aunque la intención sea buena, no lo es su ejecución. Se trata del eterno dilema televisivo. ¡Líbranos, Señor, de los programas cargados de buenas intenciones!
Ocurre que Nani Gaitán, Santiago Urrialde, Emma Ozores, Aléxis Valdés, Nuria Fergó y la propia Paz Padilla, entre otros espontáneos e invitados de distinto pelaje, no le llegan a Chiquito, quien apadrinó el invento en la primera -y única mínimamente digna- entrega del programa, ni a la suela de sus aflamencados zapatos. Especie de refrito de todos los programas de humor vistos anteriormente. Una mala fotocopia que se queda a medio camino entre ‘Genio y figura’ y aquel ‘No te rías que es peor’ de feliz recuerdo. El caso es que funcionan.
Los chistes funcionan en televisión por muy lamentables que sean quienes los cuentan. Y por pésimo que sea su contenido. De los de anoche, a los cinco minutos, apenas recordaba ninguno. Eso sí, bastante claro me quedó que Nuria Fergó, Nani Gaitán y Teté Delgado dan ganas de llorar cuando tratan de hacer reír. ¿Salvables? Santiago Urrialde, Santi Rodríguez y el mítico Arguiñano, que contó el mejor chiste de toda la noche (el del vasco con los dos sacos de patatas). Ah, por cierto. Hasta el título han plagiado estos ‘telecinqueños’ en su afán por no innovar nada. El ‘Al ataque’ de Alfonso Arús sí que tenía algo más de gracia. La pena es que ese tipo de humor, como casi todo en esta vida, haya envejecido tan mal. No somos nada.