FICHA:

Director: Richard Loncraine

Intérpretes: Morgan Freeman, Diane Keaton, Michael Cristofer, Cynthia Nixon, Claire van der Boom, Korey Jackson, Carrie Preston, Sterling Jerins, Josh Pais, Miriam Shor

Duración: 92 min.

Público: Jóvenes-adultos

Alex y Ruth llevan más de cuarenta años en el mismo piso en Nueva York, un ático sin ascensor con unas formidables vistas al puente de Brooklyn. Subir varias veces al día los cinco pisos empieza a resultar una tarea molesta, incluso difícil. Además el barrio ha cambiado: los viejos comercios han desaparecido y han sido sustituidos por modernos e impersonales supermercados. Brooklyn atrae a gente joven, es un buen momento para vender. Ático sin ascensor cuenta un par de ajetreados días en la vida de Alex y Ruth, en los que, además de mostrar su piso a diversos posibles compradores, ellos mismos visitan otros a los que podrían mudarse, y recuerdan su matrimonio.

Ático sin ascensor es una dulce nadería cuyo propósito es juntar a Diane Keaton con Morgan Freeman y ver qué ocurre, y lo que sucede es que tienen la química de un auténtico matrimonio bien avenido que llevan juntos toda la vida, que se conocen perfectamente y aceptan los defectos del otro. El director los deja discutir sobre la conveniencia o no de vender tan rápido, de buscar otra casa, de apreciar o no a tal comprador… nada relevante; tan pequeña es la historia que el guionista tuvo la triste idea de incorporar una subtrama terrorista en Nueva York; ni ella ni una colección de flash back dan a esta pequeñez más vida que la que ya tiene, merced a la pareja protagonista.

Es una constante en Richard Loncraine (Wimbledon, Firewall, Richard III) dejar que sus actores construyan la película; si el guion acompaña, mejor. En este caso el guion no acompaña nada y el director británico no hace nada por darle entidad, pero Freeman y Keaton, cuyo encanto crece con la edad, se bastan para ofrecer un espectáculo digno, con una profesionalidad envidiable.

En una ocasión le pregunté a Freeman si no se cansaba de realizar siempre el mismo papel, un hombre, a veces policía, amable y normal. Me respondió divertido que no, que era un buen papel.

En cuanto a Diane Keaton, ha representado el mismo papel varias veces en los últimos años, con Michael Douglas, De Niro, Kevin Kline, y Jack Nicholson. En el caso presente, con Morgan Freeman supera todas sus interpretaciones anteriores.

 

Firma: Fernando Gil-Delgado.