The Italian Job (2003)

Granujas a toda pastilla

Con ayuda de sus compinches habituales, Charlie, privilegiado cerebro criminal, ejecuta un brillante plan para robar lingotes de oro de la caja fuerte de un palazzo veneciano. El único detalle que Charlie no podía prever era que Steve, uno de sus hombres, le traicionaría para robarle el botín. Pero el juego no ha acabado, y Charlie regresa a California, dispuesto a recuperar el oro, más por venganza que por interés monetario. Para ello, contará con una recién llegada al equipo, Stella, experta en cajas fuertes. E ideará un sofisticado plan de robo que consiste en manipular el sistema informático que controla los semáforos, colapsar el tráfico y huir en coches de pequeño tamaño.

El director de ese estupendo film llamado Negociador, aprovecha la espectacularidad del cine moderno en esta versión libre de un clásico del cine de atracos, Un trabajo en Italia, que protagonizó Michael Caine en 1969. El espectador debe olvidar el realismo, que no la verosimilitud, en unas asombrosas persecuciones por el metro, alcantarillas e incluso escaleras. Secuencias increíbles en la vida real, pero que parecen auténticas en la pantalla. Como en los mejores films de robos, los protagonistas son granujas amorales, poco ejemplares, que no obstante caen bien en la pantalla, incluso Edward Norton, el malo de entre los malos. Para disfrutar con palomitas y a ser posible en compañía de amiguetes gritones, que nos transmitan emoción ante lo que sucede en pantalla.

Secundarios inusuales

El “Product Placement” consiste en aprovechar las secuencias cinematográficas con fines publicitarios. Quizás esta película lo lleve al extremo, al convertir un conocido modelo de coche, el Mini Cooper, en auténtico secundario de lujo de la cinta. Si las grandes estrellas de Hollywood no se despeinan tras haber sobrevivido a tremendas explosiones y tiroteos, estos automóviles no sufren ni un rasguño tras pasar por situaciones extremas, y siguen luciendo sus colores esmaltados, robando más de una vez a los protagonistas las miradas del espectador.

Experto en remakes

Mark Wahlberg parece empeñado en protagonizar los más diversos remakes de grandes películas de la historia del cine. En primer lugar, fue el protagonista de la nueva versión de El planeta de los simios, en la que heredó el papel que en su día había interpretado Charlton Heston. En La verdad sobre Charlie, remake de Charada, hizo el papel de Cary Grant.