Ficha: 136 min. | Acción | Thriller Público apropiado: Jóvenes Año: 2017 País: EE.UU. Dirección: F. Gary Gray Intérpretes: Vin Diesel, Dwayne Johnson, Michelle Rodríguez, Charlize Theron, Jason Statham, Kurt Russell, Tyrese Gibson, Luke Evans, Scott Eastwood, Nathalie Emmanuel, Elsa Pataky, Helen Mirren, Ludacris, Kristofer Hivju, Don Omar, Luke Hawx, Eden Estrella, Celestino Cornielle Octava entrega de la adrenalítica saga automovilística, arranca a toda velocidad con Dom y Letty de luna de miel en La Habana, él disputando una espectacular carrera, ella señalándole lo buen padre que puede ser en el futuro. Pero una rubia, la enigmática y malvada hacker Cifra, se cruza en el camino con Dom, y algo tiene con lo que chantajear a éste, pues de pronto se pasa al bando de ella, en lo que parece una clara traición a su antiguo equipo y a los ideales nobles por los que venía luchando últimamente. De modo que Dom se enfrenta a sus antiguos amigos, e incluso a su esposa recién estrenada, en sucesivas acciones para robar artilugios relacionados con armamento nuclear. F. Gary Gray no es ajeno a las películas donde los coches, las carreras y las persecuciones, con un equipo de colegas bien conjuntado, forman parte del argumento, en 2003 entregó The Italian Job, cinta de robos y autos minis muy resultona. Ahora repite en el subgénero apuntándose a la franquicia FF, donde coincide además con dos actores de film que dirigió hace casi 15 años, Charlize Theron y Jason Statham, además de que el mismo año había trabajado con Vin Diesel en Diablo. Y entrega entretenimiento de primera división, sin más pretensiones. Aquí tenemos un guión bien orquestado por el guionista habitual desde la tercera entrega, Chris Morgan. La premisa es mostrar a Dom Toretto como inesperado rival de quienes eran más que sus amigos, una auténtica familia. Los motivos se mostrarán a medida que avanza la trama, y tienen su razón de ser. El reencuentro con antiguos personajes, y la aparición de algunos nuevos como Little Nobody, Scott Eastwood, la villana interpretada por Charlize Theron, y el casi cameo de lujo de Helen Mirren, mamá de unos de los habituales, está bien engarzada. Ritmo dinámico y sentido del humor están bien vertebrados con lo que es fundamental en una película “veloz y furiosa”, o sea, espectaculares escenas de acción con automóviles en un vibrante “más difícil todavía”. Y en este último aspecto, la película no defrauda. Desde el arranque en las calles de La Habana, tenemos la misión en unas instalaciones en Berlín que acaban implicando a un avión, y sobre todo, los pasajes en las calles de Nueva York y en una base de submarinos rusa, verdaderamente impactantes, todo un alarde de trabajo de especialistas y expertos en efectos especiales. Firma: José María Aresté