Ficha:

103 min. | Drama

Público apropiado: Jóvenes-adultos

Año: 2015

País: Francia, España, Bulgaria

Dirección: Isabel Coixet 

Intérpretes: Juliette Binoche, Rinko Kikuchi, Gabriel Byrne, Matt Salinger, Velizar Binev, Ciro Miró, Ben Temple, Alberto Jo Lee

Película inspirada en personajes y hechos reales, en los alrededores de la última expedición del estadounidense Robert Peary para llegar al Polo Norte en 1908. Cuenta la peripecia de su esposa Josephine, que se planta en uno de los campamentos base, y se empeña en acercarse a las proximidades del lugar donde se encuentra él tratando de cumplir su meta. Algo desaconsejado por todos los exploradores del lugar, por ser la peor época del año, se acerca el invierno polar. Pero ella, tozuda, ordena al guía Bram Trevor que se ponga al frente de este nuevo grupo, del que también forman parte dos esquimales. Tras diversas penalidades Josephine llega a una cabaña donde conoce a Allaka, una mujer esquimal inuit, que le va a deparar unas cuantas sorpresas.

Isabel Coixet vuelve a rodar en inglés con un atractivo reparto encabezado por Juliette Binoche, y en el que están también Gabriel Byrne y Rinko Kikuchi. Los tres componen bien sus personajes, y nos creemos sus nacionalidades, aunque se traten realmente de una francesa, un irlandés y una japonesa. Su película fue además escogida para inaugurar el Festival de Berlín en 2015. El guión lo firma Miguel Barros, y su temática existencialista conecta con su anterior libreto para Mateo Gil en el western Blackthorn, ambas historias transcurren en la frontera en un mundo salvaje, que se aleja de lo que llamamos civilización.

A pesar del meritorio y duro rodaje en tierras heladas con bajísimas temperaturas, y del gran trabajo actoral en torno a unos personajes fuertes, sobre todo de Binoche y Kikuchi, el film es irregular. Resultan reiterativos los momentos en que Josephine se comporta, a pesar de su enorme determinación, como una mujer “fina”, dispuesta en todo momento a aparecer con aspecto impecable y hacer gala de su puritanismo. De modo que el choque, primero con Bram, de vuelta de casi todo, que no quiere cruces en su vida, y luego con Allaka, la inocencia de la vida sencilla en comunión con la naturaleza, también se diría compuesto de escenas que abundan siempre en lo mismo. Es cierto que la trama depara un par de sorpresas, que ayudan a sostener el interés, y que subyuga la fotografía de la nieve helada, metáfora del nihilismo y la sencillez frente a la sofisticación impostada. Pero en general el ritmo es cansino, el viaje del espectador se hace demasiado largo, y no parece válida la excusa de que también la protagonista pasa por ese agotamiento que acaba aproximándola a Allaka. La historia propuesta por Coixet en esta ambiciosa producción de Mediapro es hermosa, y el film contiene puntos de interés, pero, insistimos, no es redondo.

Firma: José María Aresté