Jana es la hija única de un matrimonio acomodado de la ciudad Condal. Un día ve cómo malvive robando y viviendo en la calle un niño bosquimano de su edad. Gracias a la ayuda de un hada que la irá visitando a lo largo de la película, Jana descubre que Kabu está en el hospital, de donde “desaparece” al día siguiente de que vaya a verle. Sin embargo, desde ese día, Jana realizará unas impresionantes visitas al continente de Kabu.
Género: Aventuras, Fantasía
País: España
Público: +3
Duración: 80′
Temas cinefórum
- Amistad
- Fantasía
- Imaginación
- Naturaleza
- Solidaridad
Director: Jordi Llompart
Intérpretes: Eva Gerretsen, Raymond Mvula, Leonor Watling, Verónica Blume, Adrià Collado
Guión: Jordi Llompart
Estreno DVD y BR: 10/11/2010
Valoración: ***
Contenidos (de 0 a 6): Humor 0, Acción 2, Amor 0,Violencia 0, Sexo 0
Crítica
Lo más destacable y lo que abre más titulares de este film es que se trata de la primera producción española en imagen real rodada en 3D. Y lo más emotivo es que la génesis de la historia arranca tras la accidental muerte de la hija del director, que tenía siete años, en Namibia cuando estaba rodando su anterior proyecto.
Es cierto que Jordi Llompart, también productor del proyecto, ha sabido sacar partido a la tecnología y al paisaje, cuya belleza se contempla con más viveza en la gran pantalla. Pero parace que la faceta más retratista del director, experto en documentales para IMAX (El misterio del Nilo) y artífice de la brillante serie televisiva sobre el abandono del patrimonio de la humanidad, L’oblit del passat, se ha quedado más en la forma que en el fondo. Seguramente, esto ha sucedido no por falta de voluntad, pues se lanzan numerosos mensajes sobre la conexión con las personas a través de la imaginación, así como el respeto a la naturaleza y a los valores ligados a la tierra. Sin embargo, adolece de un trabajo más fuerte sobre la trama para que se convierta en una historia sólida. Al menos, queda una buena realización y fotografía y unas intenciones positivas en cuanto al contenido, quizá demasiado animista.
Firma: Lourdes Domingo