Un drama épico que narra la increíble historia del piloto y héroe de guerra Louis “Louie” Zemperini (Jack O’Conell) que, junto a otros dos tripulantes, sobrevivió 47 días en una balsa de goma en medio del océano, al estrellarse su bombardero. Después, fue capturado por la Marina japonesa e internado en un campo de prisioneros durante la II Guerra Mundial.
Como telón de fondo de un mundo a punto de hundirse, la película sigue el viaje de “Louie” desde que era un despreocupado bribonzuelo, y estrella olímpica después, hasta su dramática odisea para alcanzar la luz desde la más profunda oscuridad.
Director:Angelina Jolie
Intérpretes:Jack O’Connell, Domhnall Gleeson, Garrett Hedlund
Guión: Joel Coen, Ethan Coen, Richard LaGravenese y William Nicholson
Duración: 140’’
Género: Bélico, Drama
Estreno: 25/12/2014
Público: +18
Valoración: ***
Contenidos (de 0 a 6):
Humor: 1
Acción: 6
Amor: 0
Violencia: 6
Sexo: 0
Crítica:
Sin duda alguna, la ya famosa actriz Angelina Jolie inicia su segunda singladura como directora, después de En tierra de sangre y miel (2011), eligiendo ahora un tema basado en la vida de aquel héroe nacional norteamericano, recientemente fallecido a la edad de 97 años. Quizás con ello, pretende dar este significativo paso confiando en que el apoyo del personaje, ya famoso, refuerce de manera notable su nueva experiencia en la gran pantalla. Y ante tal empeño, en aras de foguearse con un título asaz comprometido, ha confiado además en la madurez profesional de los hermanos Joel y Ethan Coen, oportunos guionistas de su nueva aportación cinematográfica como directora y co-productora al mismo tiempo.
Pero, aun reconociendo que se trata de una obra de envergadura, con importante resolución técnico-visual (atención a las impresionantes escenas bélicas entre aviones enemigos) en la que el director de fotografía Roger Deakins, nominado en once ocasiones por la Academia de Hollywood, demuestra su extraordinaria profesionalidad, y un desarrollo fílmico donde emoción, tensión y expectativas se complementan a lo largo de toda la cinta, llegamos con cierta fatiga a la tercera fase del film. Un film que resulta notablemente extenso, donde la acción se repite en demasía y las dramáticas y escalofriantes secuencias de tortura y sumisión en el campo de concentración japonés, aunque ajustadas a la realidad vivida por Zemperini, nos dejan anímicamente exhaustos.
Esta realidad ya la explicitó el propio personaje con posterioridad a tanto sufrimiento con estas palabras: “Una parte de ti aún cree que puedes luchar y sobrevivir por mucho dolor que tu mente conozca. Mientras hay vida hay esperanza… Lo que pase después, sólo depende de Dios”.
Fuente: Joaquín Guitart (www.taconline.net)