Series: El inocente
Oriol Paulo (Barcelona, 1975) tiene uno de los logros más envidiados en el cine español: conseguir varios taquillazos en China. Especialmente con el thriller Contratiempo (2016), que obtuvo 25 millones de dólares en esa distribución oriental. La película tenía efectismos y trampas de todo tipo para atrapar la atención del público y un reparto que brillaba: Mario Casas, Ana Wagener, José Coronado. Con la serie que ahora estrena en Netflix vuelve a contar una historia de giros incontables, además de repetir con esos actores e incorporar algunos intérpretes de primer nivel: Aura Garrido, Miki Sparbé, Juana Acosta, Alexandra Jiménez o Susi Sánchez.
El director y guionista catalán no cambia el género pero varía totalmente el tono. Desde el primer capítulo se abandona cualquier asomo de sutileza o elegancia en el desarrollo de la trama y los personajes. El guion riza el rizo siempre hacia el mismo sentido, mareando al espectador con perversiones de todo tipo que se acumulan de manera agotadora. El detallismo en lo truculento es muy desagradable, y la definición de personajes es tan forzada y artificial que resulta difícil entrar en una trama tan hiperactiva e impersonal. Todo rodado con un diseño de producción generoso y desperdiciado. En un curso magnífico de la ficción española, El inocente es un regreso a la narrativa más burda y convencional.
Firma: Claudio Sánchez