Sebas, un policía local orgulloso de su placa, está felizmente casado y tiene dos hijos maravillosos. Vamos, su vida es perfecta… hasta que su mujer le pone los cuernos con su mejor amigo y le echa de casa.

Pero Sebas no es hombre que se rinda, así que, dispuesto a luchar por lo que es suyo, se instala en la puerta de enfrente de su ex mujer, compartiendo piso con Olivia y Ana, dos chicas treintañeras, solteras y mileuristas.

Sebas tiene un compromiso con los ciudadanos, su día a día consiste en proteger a los demás y hacer que las leyes se cumplan pero ahora tiene un nuevo objetivo: recuperar a su mujer y a su familia. Y hará todo lo posible por conseguirlo.

Emisión: LaSexta, Viernes 22:00 h.

Género: Comedia

Público: +18

Valoración: *

Contenido (de 0 a 6): Humor 2, Acción 0, Violencia 0, Sexo 3.

Analizar esta serie es lo mismo que hacer un pasatiempo para buscar las siete diferencias, sólo que en este caso, es más complicado encontrarlas que en los dibujos de la prensa. Se coge al pardillo Fiti (Antonio Molero) deLos Serrano, a la histérica Belén (Malena Alterio) de Aquí no hay quien viva, a el ligón Jesús (Arturo Valls) de Cámera Cafe, aderezado con unos cuantos estereotipos más: las vecinas necesitadas de compañía masculina, la suegra de ideología «conservadora», el cuñado que trapichea con drogas y los adolescentes de hormonas revueltas, entre otros, y se fabrica un producto como tantos otros que pasan por la parrilla televisiva con más pena que gloria, aunque la audiencia dicte lo contrario.

Parece mentira que, después de tantas décadas de producción televisiva y con los adelantos que últimamente sufre la ficción española, La Sexta se lance a producir una sitcom tan poco novedosa como predecible y tan vulgar como malhablada. No se trata de una cuestión de presupuestos, ni de rodajes en exteriores, ni de grandes efectos.

Se trata, como de costumbre, de tomarse en serio el trabajo de guión, de plantear unos personajes completos y tridimensionales y de enriquecerlos con unos diálogos sugerentes y, si no es mucha molestia, inéditos. A lo mejor, algún día podremos disfrutar de la narrativa audiovisual española, pero por ahora, y después de este estreno, el futuro se prevé lejano, muy lejano.


Fuente: Mar Pons. TAC