Un plataformas muy divertido que recoge lo mejor de otros juegos del estilo.


La moda de lo retro no tiene fin. Esto ha motivado a los desarrolladores a traer de vuelta innumerables clásicos de otras épocas. En ocasiones, estas puestas al día han sido en forma de remake, es decir, con el juego rehecho desde cero. Otras veces, por el contrario, suponen un simple lavado de cara, que es lo que conocemos como remaster. Sea como fuere, hemos podido disfrutar de excelentes trabajos (como Crash Bandicoot ‘n Sane TrilogyResident Evil 2…), pero también a otros que no han cumplido con las expectativas (como el reciente remaster de Chrono Cross). Ahora, nos llega esta adaptación de un juego bastante desconocido de la época de PS2 y XBox. ¿Valdrá la pena darle otra oportunidad?

Plataformas clásico

Kao the Kangaroo es una aventura de corte tradicional que no varía ni un ápice la propuesta de hace 20 años. Esto quiere decir que estamos ante un plataformas repleto de saltos, acción desenfadada y sencillos puzles por resolver.

En este sentido, tanto la versión original como esta, nos recuerdan mucho a otros títulos como Crash Bandicoot o Spyro: Reignited Trilogy. El bueno de Kao deberá superar mil y un peligros, ya sea en forma de enemigos, plataformas móviles, saltos imposibles, etc. a lo largo de numerosos niveles englobados en diferentes mundos. En dichas fases, nos movemos hacia adelante -con la cámara a espaldas de nuestro personaje- en entornos semiabiertos que permiten la exploración pero que marcan muy claramente el camino a seguir. Al final de cada uno de los mundos deberemos enfrentarnos al villano de turno y, si hemos recogido suficientes coleccionables, podremos pasar al siguiente.

Para alargar la duración del juego, cada nivel presenta muchas cosas por hacer, tales como recoger las letras KAO; conseguir monedas de oro; recoger pergaminos que nos darán información sobre el paradero de nuestro padre y de nuestra hermana; conseguir runas mágicas; desbloquear rutas secretas… Como veis, mucho y muy variado por hacer, pero nada que no hayamos visto hasta la saciedad. Todos estos extras favorecen, lógicamente, que volvamos a jugarlo y alargan la vida útil del título.

Potenciando a nuestro canguro

Kao podrá realizar todo tipo de acciones como saltar, dar un puñetazo o un coletazo, rodar… Sin duda un buen abanico de habilidades que se potenciarán a medida que avancemos en la aventura. Los guantes mágicos nos permitirán tener habilidades únicas. Por ejemplo, podremos congelar objetos o quemarlos para acceder a nuevas zonas y avanzar en la historia.

Lo mejor:

Juego bonito y colorista.
Niveles con muchísimas cosas por hacer.

Lo peor:

Poco original. Se parece demasiado a otras propuestas.
El nivel de dificultad es muy bajo, lo que puede echar para atrás a los más experimentados.

Conclusiones:

Kao the kangaroo es un plataformas competente pero que no sobresale respecto a la competencia. Es largo, está repleto de cosas por hacer y los niveles son muy originales, pero no aporta nada que no hayamos visto en otros juegos. A ratos recuerda en exceso a Crash Bandicoot (hasta en la banda sonora) y a Spyro (los mundos son muy del estilo). Una opción más a tener en cuenta.