Ficha: 117 min. | Aventuras | Fantástico Público apropiado: Todos Año: 2016 País: EE.UU., Canadá, Reino Unido Dirección: Steven Spielberg Intérpretes: Ruby Barnhill, Mark Rylance, Jemaine Clement, Rebecca Hall, Bill Hader, Penelope Wilton, Adam Godley, Ólafur Darri Ólafsson Adaptación de la obra de Roald Dahl a cargo de Steven Spielberg, cuenta con un guión de Melissa Mathison, fallecida poco después de concluirlo, y que firmó el libreto de E.T., el extraterrestre. Con este film comparte la idea de cuento de amistad entre dos personas muy diferentes, una niña huérfana, Sophie, y un gigante bonachón, al que ella nombra por las iniciales BFG (pronúnciese “biefyi”), y en español sencillamente “grandullón”. Además se cita expresamente a Charles Dickens como un referente. La pequeña vive en un Londres en un orfanato llevado por una rígida directora, y a ella le encanta esperar despierta a la hora de las criaturas mágicas (que contrariamente a la creencia popular no sería la medianoche, sino las tres de la madrugada) y leer libros con su linterna; asomada por la fachada principal del centro, cree atisbar la mano de un… ¡gigante! Y éste la secuestra llevándosela al país de los gigantes, porque nadie debe saber de su existencia y de las de sus congéneres. Y resulta que aunque él es un gigante bonachón, los otros son todo lo contrario, y les gusta comerse a los seres humanos (“guisantes”, en una broma que sólo puede entenderse en inglés), sobre todo a los niños. Así que le toca proteger a su nueva amiguita… Película familiar amable, con la que Spielberg retorna al mundo de la infancia, y más concretamente de los cuentos de hadas, tan querido por él, y que le hizo identificarse con Peter Pan, el niño que no quería crecer. Tanto la citada E.T., como Hook, le llevaron por esa dirección, con resultados notables, sobre todo con el primer título. Aquí, aunque el resultado tiene encanto, y técnicamente es de primerísima calidad, no se puede negar que el film es irregular, con momentos algo pesados, sobre todo cuando se nos describe la faceta de BFG de cazador de sueños, representados visualmente como una especie de luciérnagas. Puede que el universo de Dahl sea demasiado literario y con un sentido del humor muy particular, pero el caso es que, dejadas aparte las dos versiones fílmicas existentes de “Charlie y la fábrica de chocolate”, con Johnny Depp y Gene Wilder encarnando a Willy Wonka, las otras adaptaciones no han tenido una acogida que pueda calificarse de espectacular. Aunque Mark Rylance hace un trabajo notable dando vida al gigante, su peculiar forma de hablar equivocando las palabras puede cargar un poquito. Mientras que la pequeña Ruby Barnhill, está correcta, pero no es una de esas niñas actrices que roban inmediatamente el corazón al espectador. Insistimos, visualmente la cinta es estupenda. Y merece la pena destacar las escenas del encuentro con la reina y el desayuno en el palacio real, muy, muy divertidas, con los efectos especiales al servicio de la narración, como debe ser. Firma: José María Aresté