Ficha:
Edita: 2K Games
Género: Lucha
Plataformas: Xbox One, PS4, PS3 ; Xbox 360, PC
Edad recomendad: 16+
Como ocurre con algunas sagas de videojuego, caso FIFA, en la serie WWE 2K cualquier momento es bueno para hacerse con el último título de la temporada y disfrutar de su contenido, o sea leña al mono en un espectáculo sin igual. La edición vigente y oficial de la lucha americana es una puesta al día virtual de un show televisivo protagonizado por mastodónticos actores, o lo que es lo mismo luchadores repartiendo sopapos y lanzando patadas a tutiplén. El caso es que con ‘WWE 2K17’ los fans del wrestling, nombre por el cual también es conocido este pseudo-deporte, lo van a pasar en grande con el control en sus manos, manejando a “angelitos” tan populares como Brock Lesnar, Randy Orton, John Cena, AJ Styles, Nakamura… las divas Page, Sasha Banks… Vamos, una fauna de bestias pardas en acción -hasta 130- de lo que en realidad es una lucha ficticia de colosos donde los castañazos de “pega” son ensayados para entretener al personal, aunque en el juego se ve de lo más realista.
No obstante este título reproduce todo el ambiente de la WWE con enorme fidelidad, tanto dentro como fuera del ring. Aspectos tan característicos como las llamativas entradas en escena de los luchadores justo antes del enfrentamiento o los desafiantes speech delante de cámara con verborrea de sapos y culebras, forman parte también de los alicientes. Bravuconería e impostura burlona como antesala a combates que podemos celebrar a cara de perro con mucha diversión por delante.
Entre lo más destacado del juego están las novedades en el clásico modo Mi Carrera, que nos da la opción de convertirnos en el famoso Paul Heyman Guy; la inclusión de un nuevo sistema de promos para retar a otros rivales micrófono en mano; nuevas e intensas batallas en los pasillos de producción y despachos de los mandamases de la WWE; y el nuevo sistema de creación. Con esta última herramienta, el jugador puede editar súper estrellas de cientos de formas posibles y con multitud de grupos de movimientos, crear arenas sobre planos, asimismo shows (los particulares de los combatientes), entradas y títulos. Hasta se cuenta con opciones de crear una victoria y vídeos. Esto aporta mayor inmersión en el mundillo del wrestilng. Además nos abre una puerta a la socialización en Internet al poder compartir estas creaciones con otros usuarios.
Respecto a la pura jugabilidad, antes de cada combate disponemos ya de muchos “bicharracos” con todas sus habilidades depuradas, para que el jugador pueda desplegarlas a gusto en diferentes modalidades, incluyendo “galletas” online hasta entre ocho usuarios. Todos combinando rápidamente botones para ejecutar llaves imposibles que retuercen a descomunales guerreros, el vuelo sin motor de gigantes que aterrizarán sobre otros ya en posición horizontal por el fragor de la batalla, sopapos por aquí, doble patada por allá, un sillazo en el cogote y de rebote golpetazo contra la mesa de jueces… That´s Entertainment señores, masas de músculos batiéndose con inusitada ferocidad entrenada. Y que no pare la música hasta dar con el rival en la lona o hacerle volar fuera de ella, que todo es una mentira incruenta.
Sin duda para lo amantes del wrestling ‘WWE 2K17’ es un título imprescindible, pero también puede ser una válvula de escape para muchos que busquen ratitos de diversión sui generis, repartiendo cera con los protagonistas de un show intransferible. Ojo, si bien su connotación violenta recomienda ser jugado a partir de los 16 años, más que puñetazos propinamos tortazos. Sirva el matiz.
Firma: Nina Cuadrado
No obstante este título reproduce todo el ambiente de la WWE con enorme fidelidad, tanto dentro como fuera del ring. Aspectos tan característicos como las llamativas entradas en escena de los luchadores justo antes del enfrentamiento o los desafiantes speech delante de cámara con verborrea de sapos y culebras, forman parte también de los alicientes. Bravuconería e impostura burlona como antesala a combates que podemos celebrar a cara de perro con mucha diversión por delante.
Entre lo más destacado del juego están las novedades en el clásico modo Mi Carrera, que nos da la opción de convertirnos en el famoso Paul Heyman Guy; la inclusión de un nuevo sistema de promos para retar a otros rivales micrófono en mano; nuevas e intensas batallas en los pasillos de producción y despachos de los mandamases de la WWE; y el nuevo sistema de creación. Con esta última herramienta, el jugador puede editar súper estrellas de cientos de formas posibles y con multitud de grupos de movimientos, crear arenas sobre planos, asimismo shows (los particulares de los combatientes), entradas y títulos. Hasta se cuenta con opciones de crear una victoria y vídeos. Esto aporta mayor inmersión en el mundillo del wrestilng. Además nos abre una puerta a la socialización en Internet al poder compartir estas creaciones con otros usuarios.
Respecto a la pura jugabilidad, antes de cada combate disponemos ya de muchos “bicharracos” con todas sus habilidades depuradas, para que el jugador pueda desplegarlas a gusto en diferentes modalidades, incluyendo “galletas” online hasta entre ocho usuarios. Todos combinando rápidamente botones para ejecutar llaves imposibles que retuercen a descomunales guerreros, el vuelo sin motor de gigantes que aterrizarán sobre otros ya en posición horizontal por el fragor de la batalla, sopapos por aquí, doble patada por allá, un sillazo en el cogote y de rebote golpetazo contra la mesa de jueces… That´s Entertainment señores, masas de músculos batiéndose con inusitada ferocidad entrenada. Y que no pare la música hasta dar con el rival en la lona o hacerle volar fuera de ella, que todo es una mentira incruenta.
Sin duda para lo amantes del wrestling ‘WWE 2K17’ es un título imprescindible, pero también puede ser una válvula de escape para muchos que busquen ratitos de diversión sui generis, repartiendo cera con los protagonistas de un show intransferible. Ojo, si bien su connotación violenta recomienda ser jugado a partir de los 16 años, más que puñetazos propinamos tortazos. Sirva el matiz.
Firma: Nina Cuadrado